EN EL BOSQUE DE LOS CIEN ACRES HACÍA UNA MAÑANA ESTUPENDA.
CUANDO WINNIE THE POOH SE LEVANTÓ, FUE A REUNIRSE CON SU MEJOR AMIGO, CHRISTOPHER ROBIN, EN GRASSY KNOLL.
ERA UN DÍA PERFECTO PARA QUE LOS DOS JUGARAN COMO BUENOS AMIGOS.
PERO CHRISTOPHER ROBIN PARECÍA PREOCUPADO.
-TENGO QUE DECIRTE UNA COSA, OSO POOH –SUSPIRÓ.
-HOY ES UN DÍA PARA HACER COSAS, NO PARA HABLAR –DIJO POOH-. Y HAGAMOS LO QUE HAGAMOS, LO HAREMOS JUNTOS.
-¿QUÉ PASARÍA SI VINIERAS MAÑANA Y YA NO ESTUVIÉRAMOS JUNTOS? –PREGUNTÓ CHRISTOPHER ROBIN.
-¿A QUÉ TE REFIERES CON “NO ESTAR JUNTOS”? –PREGUNTÓ POOH.
-ME REFIERO A QUE YO PODRÍA NO VENIR –DIJO SU AMIGO.
-ME ALEGRO DE QUE SEA MAÑANA –CONTESTÓ POOH SONRIENDO-. HOY NO QUIERO PENSAR EN ESO.
SIN EMBARGO, A LA MAÑANA SIGUIENTE NO HABÍA SEÑALES DE CHRISTOPHER ROBIN. SÓLO HABÍA UN GRAN TARRO DE MIEL CON UNA CINTA ALREDEDOR… Y UNA NOTA.
-¡OH! –DIJO POOH AL VER LA NOTA-. QUIZÁ ESTA MIEL SEA PARA MÍ.
SUSPIRÓ Y PENSÓ: “¡OJALÁ LO SEA!”
-ME ENCANTARÍA QUE ESTE ENORME TARRO DE MIEL FUERA PARA MÍ –DIJO AL VER A SUS AMIGOS.
-¡LEE LA NOTA Y LO SABRÁS! –LE SUGIRIÓ EL CONEJO.
-PODEMOS PEDIR A LA LECHUZA QUE LA LEA –DIJO IGOR.
-ES UNA BUENA IDEA –RESPONDIÓ POOH.
Y ASÍ LO HICIERON.
LECHUZA LEYÓ LA NOTA Y DIJO:
-CHRISTOPHER ROBIN HA IDO AL ESQUELETO.
POR SUPUESTO, LO QUE PONÍA ERA ESCUELA, PERO LA VERDAD ES QUE LECHUZA NO LEÍA MUY BIEN.
-TENEMOS QUE CONSEGUIR QUE VUELVA –DIJO POOH.
ECHABA MUCHO DE MENOS A SU AMIGO.
LECHUZA LES DIO UN MAPA PARA QUE ENCONTRARAN EL CAMINO, PERO TAMPOCO SABÍAN LEERLO.
LECHUZA LES GUIÓ ENCANTADA, GESTICULANDO CON LAS ALAS.
PERO LOS SALVADORES NO SE PUSIERON MUY CONTENTOS AL CRUZAR EL PUENTE.
SE DIERON CUENTA DE QUE EL CAMINO SE ADENTRABA EN LO MÁS PROFUNDO DEL BOSQUE DE LOS CIEN ACRES.
Y ADEMÁS, TIGGER DIJO QUE PODÍA HABER UN ESQUELESAURO EN EL ESQUELETO.
TUVIERON DIFICULTADES AL ATRAVESAR UN BOSQUE DE ESPINOS.
EN EL VALLE DE LAS FLORES, LAS MARIPOSAS INTENTARON LLEVARSE A PIGLET.
DESPUÉS, EL GRUPO CRUZÓ LA GARGANTA DE LOS GRITOS CON MUCHÍSIMO CUIDADO POR UN TRONCO QUE HACÍA DE PUENTE.
CUANDO ENTRARON EN EL INTERIOR DE LA CUEVA DEL ESQUELETO, OYERON UN RUGIDO.
-¡EL ESQUELESAURO! –CHILLÓ PIGLET.
SE OYÓ OTRO RUGIDO.
-¡SE ESTÁ ACERCANDO! –GIMIÓ IGOR.
EL EQUIPO DE RESCATE SE DISPERSÓ Y CADA UNO CORRIÓ EN UNA DIRECCIÓN. EL QUE ENCONTRARA ANTES A CHRISTOPHER ROBIN, SERÍA EL GANADOR.
CUANDO VOLVIERON A REUNIRSE EN LA CAVERNA DE CRISTAL, AÚN NO HABÍAN ENCONTRADO A SU AMIGO.
Y LO QUE ERA PEOR: ¿DÓNDE ESTABA POOH?
CUANDO VOLVIERON A OÍR UN RUGIDO MÁS FUERTE, ESTABAN CONVENCIDOS DE QUE EL ESQUELESAURO LE HABÍA ATRAPADO.
¡QUÉ ALIVIO QUE EL ESQUELESAURO NO HUBIERA ATRAPADO A POOH Y QUE ESTUVIERA JUSTO DETRÁS DE ELLOS! PERO ENTONCES LOS RUGIDOS EMPEZARON A SER MÁS Y MÁS FUERTES, Y UNA SOMBRA SE EXTENDIÓ SOBRE LAS CABEZAS DEL EQUIPO DE SALVACIÓN.
-¡ES ÉL! –CHILLÓ CONEJO-. ¡ES… ES!
ERA… ¡CHRISTOPHER ROBIN!
-¿QUÉ HACÉIS AQUÍ? –PREGUNTÓ ASOMBRADO.
-VENIMOS A SALVARTE DEL ESQUELETO –DIJO TIGGER.
-¿ESQUELETO? ¡HE ESTADO EN LA ESCUELA! –RESPONDIÓ CHRISTOPHER ROBIN.
-PERO SI HEMOS OÍDO LOS RUGIDOS DEL ESQUELOSAURO –DIJO PIGLET.
OTRO RUGIDO SE EXTENDIÓ POR LA CUEVA.
CHRISTOPHER ROBIN INTENTÓ DISIMULAR LA RISA.
-NO ES UN ESQUELOSAURO –DIJO-. SON LOS QUEJIDOS DEL ESTÓMAGO VACÍO DE UN OSO QUE SUSPIRA POR UN POCO DE MIEL.
CUANDO TOCÓ LA TRIPA DE POOH Y SE VOLVIERON A OÍR LOS RUGIDOS, COMPRENDIERON QUE ERA POOH Y DEJARON DE TENER MIEDO.
CHRISTOPHER ROBIN Y POOH FUERON AL GRASSY KNOLL.
-POOH –DIJO CHRISTOPHER ROBIN-, AUNQUE ALGÚN DÍA NOS SEPAREMOS, YO SIEMPRE ESTARÉ CONTIGO.
POOH MIRÓ A SU MEJOR AMIGO A LOS OJOS.
-SÍ, CHRISTOPHER ROBIN. YO TAMBIÉN ESTARÉ SIEMPRE CONTIGO.
Y SE QUEDARON SENTADOS EN SU LUGAR FAVORITO, VIENDO JUNTOS LA PUESTA DE SOL.
FIN
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VISTO EN: MUNDOPEKE
WINNIE POOH Y EL ÁRBOL DE LA MIEL
PASEANDO POR EL BOSQUE, WINNIE LLEGÓ A UN CLARO DONDE CRECÍA UN GRAN ROBLE, ALREDEDOR DE CUYA COPA ZUMBABAN LAS ABEJAS. TRAS MUCHO PENSAR (A WINNIE LE CUESTA BASTANTE TRABAJO) DECIDIÓ QUE DONDE HABÍA ABEJAS HABÍA MIEL, Y LA MIEL ERA LO QUE MÁS LE GUSTABA EN ESTE MUNDO. ASÍ ES QUE SE PUSO A TREPAR Y TREPAR, Y CUANDO YA CASI LA TENÍA AL ALCANCE DE LA MANO, LA RAMA QUE LE SOSTENÍA SE ROMPIÓ Y CAYÓ SOBRE UN MONTÓN DE ZARZAS.
WINNIE SE PUSO A PENSAR DE NUEVO Y ESTA VEZ CREYÓ HABER ENCONTRADO UNA SOLUCIÓN BRILLANTE, ASÍ ES QUE SE FUE EN BUSCA DE SU AMIGO CRISTÓBAL ROBIN PARA QUE LE PRESTARA SU GLOBO AZUL. ATADO AL GLOBO LLEGARÍA HASTA EL PANAL DE MIEL. ESTABA SEGURO QUE LAS ABEJAS CONFUNDIRÍAN EL GLOBO CON EL CIELO, Y A ÉL MISMO, BIEN MANCHADO DE BARRO, CON UNA NUBE. LA IDEA NO HUBIERA SIDO MALA SI HUBIERA SALIDO BIEN; PERO LAS ABEJAS PINCHARON EL GLOBO Y EL OSITO CAYÓ A TIERRA NUEVAMENTE.
TRAS SU FRACASO, WINNIE FUE A VISITAR A SU AMIGO CONEJO. SABÍA QUE EN SU CASA SIEMPRE HABÍA DOS O TRES TARROS DE MIEL Y ESTABA SEGURO DE QUE LE INVITARÍA A TOMAR UN POQUITO. METIÓ LA CABEZA POR LA ENTRADA DE LA MADRIGUERA DE CONEJO Y PREGUNTÓ SI ESTABA EN CASA; A PESAR DE LAS NEGATIVAS DE CONEJO QUE DECÍA QUE SE HABÍA MARCHADO, WINNIE ENTRÓ, Y POR CORTESÍA CONEJO NO TUVO MÁS REMEDIO QUE INVITARLE A TOMAR UN POCO DE MIEL.
PERO COMO CUANDO DE MIEL SE TRATA EL OSITO NO SE HARTA NUNCA, NO PASÓ MUCHO TIEMPO ANTES DE QUE ACABARA CON TODAS LAS RESERVAS QUE HABÍA EN LA MADRIGUERA.
EL PROBLEMA ESTUVO A LA HORA DE MARCHARSE. HABÍA ENGORDADO TANTO QUE QUEDÓ ATASCADO EN LA ENTRADA DE LA MADRIGUERA, CON LA MITAD DEL CUERPO DENTRO Y LA OTRA MITAD FUERA. CONEJO CORRIÓ EN BUSCA DE CRISTÓBAL PARA QUE LES AYUDARA A SALIR.
FUE IMPOSIBLE DESATASCARLO, ASÍ ES QUE CRISTÓBAL ROBIN DECIDIÓ QUE NO HABÍA OTRO REMEDIO QUE ESPERAR A QUE ADELGAZARA. WINNIE PERMANECERÍA ALLÍ HASTA ENTONCES, CON LA PROHIBICIÓN ABSOLUTA DE TOMAR NADA DE ALIMENTO.
LOS AMIGOS ACUDÍAN A VISITARLE Y LE ENTRETENÍAN CON SUS HISTORIAS, PESE A QUE WINNIE TAN SÓLO PENSABA EN QUE ALGUIEN LE DIERA ALGO DE COMER; PERO CRISTÓBAL LO HABÍA PROHIBIDO Y NADIE SE ATREVÍA A DESOBEDECER. PARA QUE NO PASARA FRÍO POR LAS NOCHES, LECHONCITO LE ATÓ UN PAÑUELO A LA CABEZA Y SE DESPIDIÓ HASTA EL DÍA SIGUIENTE.
LOS DÍAS PASARON. CONEJO EMPUJABA A WINNIE DE CUANDO EN CUANDO PARA COMPROBAR SI HABÍA ADELGAZADO LO SUFICIENTE Y YA PODIA DEJARLE SU ENTRADA LIBRE. POR FIN LLEGÓ EL MOMENTO DE SACAR AL OSO DE SU PRISIÓN. LLEGÓ CRISTÓBAL TOCANDO EL TAMBOR AL FRENTE DEL CORTEJO DE QUIENES INTENTARÍAN LA PROEZA: ALLÍ MARCHABAN CANGU, RO, CONEJO, TOPO, BÚHO Y EL BURRITO IGORE.
CRISTÓBAL AGARRÓ LAS MANOS DE WINNIE Y EMPEZÓ A TIRAR; DE CRISTÓBAL TIRABA CANGU; DE CANGU, IGORE; DE IGORE, LECHONCITO… AL FIN, CON UN ¡PLOP! ESPECTACULAR, WINNIE SALIÓ DISPARADO POR LOS AIRES MIENTRAS SUS AMIGOS RODABAN POR EL SUELO.
WINNIE FUE A ESTRELLARSE CONTRA LA COPA DEL ROBLE… ¡Y SE QUEDÓ ATASCADO EN EL HUECO DEL ÁRBOL! ¡JUSTO EN LA COLMENA REPLETA DE MIEL! MIENTRAS LA COMÍA A PUÑADOS PENSABA QUE NO LE IMPORTABA ENGORDAR UN POCO MÁS.
AUTOR: A. A. MILNE
VISTO EN PACOMOVA
